Al socaire

Blog personal de Angel Arias. La mayor parte de los contenidos son [email protected], aunque los dibujos, poemas y relatos tienen el [email protected] del autor

  • Inicio
  • Sobre mí

Copyright © 2021

Usted está aquí: Inicio / Archivos parafalso discurso real

Falsa alocución de Navidad de Felipe VI

24 diciembre, 2019 By amarias Dejar un comentario

La Casa Real, de la discreta manera que es intrínseca a tan delicada institución, ha pedido a varias autoridades civiles y militares sugerencias para el discurso o alocución navideña de S.M. El Rey, correspondiente a este malhadado año de 2019.

Una vez más, no me han llamado para recoger mis apreciaciones. Pero, dada la especial situación en que nos encontramos y, como prueba de mi disposición a servir a la Constitución, al legítimo Jefe de Estado y a la alegría que se corresponde con estas Fiestas entrañables, tanto para tirios como para troyanos, para creyentes como agnósticos, monárquicos como republicanos, he redactado el siguiente texto, que someto a la general apreciación :

“Ciudadanos y ciudadanas:

Como vengo haciendo desde hace ya seis años, por tradición que implantó, en su momento,  el anterior Jefe de Estado, Francisco Franco, me dirijo a vosotros para que tengáis algo que comentar durante la cena familiar.

Estoy firmemente convencido de que este será el último año que me dirija a vosotros como Rey por Navidad. Aunque la mayoría parece que creéis que vivo al margen de lo que sucede en España, leo regularmente las encuestas y, por eso, no tengo dudas de que muchos españoles piensan que a la Monarquía se le ha pasado el arroz. Sinceramente, no me siento capaz de ser Jefe de Estado de un gobierno formado por republicanos e independentistas.

Si alguien quiere defender la Constitución de 1978, por la que vuestros padres y abuelos decidieron dar el carpetazo a la guerra civil, no creo que deba serlo yo. Cualquier intervención en ese sentido, recordándoos el deber de respetarla, en los diferentes textos que el Gobierno correspondiente me hizo leer, ha sido interpretada como que estaba interfiriendo en la vida política. Así que estoy mejor callado, hablándoos de que os améis los unos a los otros como si fuera Jesucristo, dicho sea con perdón, pues no quería ofender a nadie, ya que hace tiempo que el Estado ha pasado a ser aconfesional, es decir, en la interpretación más común, agnóstico. ¡Cómo envidio expresiones como “In God we trust” o “God save the Queen”, que son orgullo de países más avanzados que el nuestro!

Creo haber sido un Rey bastante discreto, a pesar de mi altura física de miras, que me ha hecho estar siempre dispuesto, en un país en el que pocos superan el metro ochenta de estatura. Aguanté con estoicismo los abucheos y los achuchones, según a dónde me llevaban. Tengo un cuñado en la cárcel por un delito que, en verdad, al día de hoy aún no se cuál ha sido. No me hablo con la mitad de mi familia. Mis hijas saben varios idiomas, alguno de ellos tan inútil como el catalán, el euskera o el gallego, pero la princesa de Asturias es absolutamente improbable que algún dúa pueda ser reina y, desde luego, yo no se lo deseo.

Aguantaré, pues, el tipo hasta que votéis esa nueva Constitución en la que lo más importante que muchos quieren modificar, como si os fuera en ello la vida, es el Título II. Porque sé bien que “la mayoría” – es decir, los que se manifiestan- deseáis cambiar es la forma del Estado, y convertir a España en una República federal. Como todo lo que asume este país que conozco bien, porque no en vano he tenido los mejores profesores de Historia, la decisión servirá para poco tiempo, porque surgirán descontentos de inmediato: unos querrán volver a la Monarquía, aunque no sea con los Borbones, otros preferirán la anarquía como fórmula de máxima libertad.

No me fío de la combinación entre socialistas, comunistas e independentistas. Ahora me sonríen y dicen que no hay problemas en que un Rey sea jefe de Estado de un gobierno republicano, comunista e independentista, ya que soy solo una figura decorativa, pero se que acabarán pidiendo mi cabeza, rompiéndome como un jarrón de porcelana puesto sobre la mesa camilla.

Cuidado, como advertencia a navegantes, aunque me vaya. Mis asesores políticos más cercanos, que son los mismos que aconsejan al Partido Socialista, me indican que el que España sea federal -monarquía o república, qué mas da-  solo servirá durante algunos escasos años para tranquilizar a Cataluña y Euskadi, y que pronto, todas las competencias del Estado central habrán sido distribuidas entre los seis o siete estados o macro-regiones, que propondrán, por tanto, su independencia total. Será, pues, un carajal, si se me permite la expresión: “a hell”, para que lo entiendan los catalanes.

¿Os habéis olvidado de vuestro principal problema? Os lo recuerdo: es el paro. No el cambio climático, por el que poco podéis hacer, siendo España (con o sin Catalunya) un país pequeño…bueno…mediano; las personas sabias con las que consulté me informan de que de poco servirá convertir al país en un ejemplo para el mundo, cuando para reducir a los niveles de descarbonización hay que invertir en una proporción inasumible para España, aumentar la dependencia tecnológica del exterior y dejar sin uso y sin completar su amortización instalaciones muy costosas.

En este caso, es mejor que lo hagan otros primero, que los Estados grandes y más contaminantes tomen sus decisiones y esperar a ver qué pasa, dedicando los esfuerzos propios a paliar las consecuencias del incremento de la temperatura media de la Tierra, que afectarán gravemente, en nuestro territorio, a las poblaciones costeras y provocarán aún mayores aumentos de inundaciones, incendios y pérdidas materiales y humanas que las que sufrimos este año.

He preguntado a mi padre, el Rey Juan Carlos, sobre sus ideas para aumentar la actividad y el empleo. Mi padre cree que es importante seguir siendo amigo de los árabes. A él le fue bien y tiene muy buenas relaciones con la familia saudí. España tiene buenas empresas de construcción, magníficos futbolistas, y se podrían construir muchos estadios en Arabia saudí. También hay posibilidades grandes, me dice, en la venta de armamento, municiones y equipos todoterreno y auxiliares. No deberíamos olvidar que Estados Unidos, China y Rusia se están preparando para la tercera guerra mundial. ¿Tenemos dudas de qué lado debemos estar? Es importante garantizar que ninguna de las potencias se atrevan a utilizar España como campo de pruebas para sus equipos bélicos y lo razonable es ayudar a desplazar el foco de tensión, cuanto más lejos, mejor.

No quiero cansaros en esta noche especial. Agradezco la formación que me ha dado el país permitiéndome aprender idiomas, y mantener muy buenas relaciones con mucha gente. He vencido hace tiempo mi timidez y me muevo bien en situaciones difíciles, sabiendo mantener el tipo sin pestañear. Creo que puedo ser un buen comercial de una empresa multinacional, o sea, que no creo que tenga problemas para sacar adelante mi familia. La reina Letizia está también muy preparada, y eso ayuda. Supongo que no tendré problema con las puertas giratorias. Por cierto, estoy volviendo a ver El último emperador, de Bertolucci, y siempre se encuentran ideas.

(Atención: leer solo en la versión para amigos: Permitidme algo de publicidad bien intencionada. Si queréis leer unos poemas interesantes y, además, ayudar a la investigación contra el cáncer, adquirid el libro Sonetos desde el Hospital. Cuesta solo diez euros y la mitad se destinan a la AECC. Lo escribió mi amigo Angel Manuel Arias, al que no conozco personalmente, pero he oído hablar de él y me gusta su peculiar sentido del humor.)

He comentado con la reina sobre la necesidad de cambiar la orientación en la educación de mis hijas. Me desaconsejan que hagan alguna ingeniería, porque no tiene muchas salidas y está mal pagada para el esfuerzo que suponen los estudios, y no parece ilusionarles la medicina. Letizia opina que sería mejor que iniciaran en el esoterismo, tal vez la magia o la canción protesta. Admito sugerencias al buzón casareal.org, que funcionará aún durante dos semanas más. Después, publicaré la forma de contactar con nosotros, cuando deje de ser vuestro Rey, en el blog que pienso crear y que se llamará “Toogoodtobeking”, nombre que ya tengo registrado.

Lo dicho, Feliz Navidad. Que el niño Jesús os traiga paz, españoles. Yo hice lo posible”


Compra el libro “Sonetos desde el hospital”

Archivado en:Actualidad, Política, Sociedad Etiquetado con:discurso del Rey, falso discurso real, felipe VI, Navidad

Entradas recientes

  • Nací con vocación de emigrante (Poema)
  • Del Diario de un Hombre Educado (Poemas)
  • Salvados por la UME
  • Frail democracies (Débiles democracias)
  • Elogio y servidumbre del centro
  • No hay mejor momento (Poema)
  • Son todos muy jóvenes (Poema)
  • Entendiendo mejor el Cáncer de vejiga
  • Un soneto tempranero
  • Si no me conocéis, este es mi nombre (Poema)
  • Falsa alocución de Navidad de Felipe VI en 2020
  • ¿Qué fue del grafeno?
  • Para empezar, aconsejo un caldo calentito (Poema burlesco)
  • Escribiría un poema de amor esta noche (Poemas)
  • Infantilismo, pasotismo y Alzheimer en la política española

Categorías

  • Actualidad
  • Administraciones públcias
  • Administraciones públicas
  • Ambiente
  • Arte
  • Asturias
  • Aves
  • Cartas filípicas
  • Cataluña
  • China
  • Cuentos y otras creaciones literarias
  • Cultura
  • Defensa
  • Deporte
  • Derecho
  • Dibujos y pinturas
  • Diccionario desvergonzado
  • Economía
  • Educación
  • Ejército
  • Empleo
  • Empresa
  • Energía
  • España
  • Europa
  • Filosofía
  • Fisica
  • Geología
  • Industria
  • Ingeniería
  • Internacional
  • Investigación
  • Linkweak
  • Literatura
  • Medicina
  • mineria
  • Mujer
  • Personal
  • Poesía
  • Política
  • Religión
  • Restauración
  • Sanidad
  • Seguridad
  • Sin categoría
  • Sindicatos
  • Sociedad
  • Tecnologías
  • Transporte
  • Turismo
  • Uncategorized
  • Universidad
  • Urbanismo
  • Venezuela

Archivos

  • enero 2021 (5)
  • diciembre 2020 (17)
  • noviembre 2020 (9)
  • octubre 2020 (5)
  • septiembre 2020 (5)
  • agosto 2020 (6)
  • julio 2020 (8)
  • junio 2020 (15)
  • mayo 2020 (26)
  • abril 2020 (35)
  • marzo 2020 (31)
  • febrero 2020 (9)
  • enero 2020 (3)
  • diciembre 2019 (11)
  • noviembre 2019 (8)
  • octubre 2019 (7)
  • septiembre 2019 (8)
  • agosto 2019 (4)
  • julio 2019 (9)
  • junio 2019 (6)
  • mayo 2019 (9)
  • abril 2019 (8)
  • marzo 2019 (11)
  • febrero 2019 (8)
  • enero 2019 (7)
  • diciembre 2018 (8)
  • noviembre 2018 (6)
  • octubre 2018 (5)
  • septiembre 2018 (2)
  • agosto 2018 (3)
  • julio 2018 (5)
  • junio 2018 (9)
  • mayo 2018 (4)
  • abril 2018 (2)
  • marzo 2018 (8)
  • febrero 2018 (5)
  • enero 2018 (10)
  • diciembre 2017 (14)
  • noviembre 2017 (4)
  • octubre 2017 (12)
  • septiembre 2017 (10)
  • agosto 2017 (5)
  • julio 2017 (7)
  • junio 2017 (8)
  • mayo 2017 (11)
  • abril 2017 (3)
  • marzo 2017 (12)
  • febrero 2017 (13)
  • enero 2017 (12)
  • diciembre 2016 (14)
  • noviembre 2016 (8)
  • octubre 2016 (11)
  • septiembre 2016 (3)
  • agosto 2016 (5)
  • julio 2016 (5)
  • junio 2016 (10)
  • mayo 2016 (7)
  • abril 2016 (13)
  • marzo 2016 (25)
  • febrero 2016 (13)
  • enero 2016 (12)
  • diciembre 2015 (15)
  • noviembre 2015 (5)
  • octubre 2015 (5)
  • septiembre 2015 (12)
  • agosto 2015 (1)
  • julio 2015 (6)
  • junio 2015 (9)
  • mayo 2015 (16)
  • abril 2015 (14)
  • marzo 2015 (16)
  • febrero 2015 (10)
  • enero 2015 (16)
  • diciembre 2014 (24)
  • noviembre 2014 (6)
  • octubre 2014 (14)
  • septiembre 2014 (15)
  • agosto 2014 (7)
  • julio 2014 (28)
  • junio 2014 (23)
  • mayo 2014 (27)
  • abril 2014 (28)
  • marzo 2014 (21)
  • febrero 2014 (20)
  • enero 2014 (22)
  • diciembre 2013 (20)
  • noviembre 2013 (24)
  • octubre 2013 (29)
  • septiembre 2013 (28)
  • agosto 2013 (3)
  • julio 2013 (36)
  • junio 2013 (35)
  • mayo 2013 (28)
  • abril 2013 (32)
  • marzo 2013 (30)
  • febrero 2013 (28)
  • enero 2013 (35)
  • diciembre 2012 (3)
enero 2021
L M X J V S D
 123
45678910
11121314151617
18192021222324
25262728293031
« Dic