25
A Garcilaso
“Cuando me paro a contemplar mi estado”
El último lugar donde haya estado,
con cuanto hasta ahora hube traído
fue para dar lo ganado por perdido
y avanzando sin nada aquí he llegado.
Si algo supe, lo tengo ya olvidado
ignorando también por qué he venido
sin encontrar razones ni sentido
a cuanto antes nos mereció cuidado.
De esta ruina no tuve parte ni arte
que no fue mi propósito acabarme
y alcancé este final sin yo quererlo,
cuidando por los riscos no matarme,
y poniendo por lo menos de mi parte
la voluntad de reír viendo perderlo.
26
A Miguel Hernández
“Como el toro he nacido para el luto”
No nací preparado para el luto
más bien para el gozo estoy marcado,
aunque pronto la herida del costado
tuvo en la desazón único fruto.
Se nos hizo el gigante diminuto
que de lejos me creí desmesurado
y nublo la visión de enamorado
ante cada batalla que disputo.
Tengo toda alabanza por castigo
si la percibo en interés bañada;
y del coro, el estruendo más sonoro
no me desviará del fin que persigo,
que no pretendo defenderlo a espada
sino a largas cambiadas con el toro.