Al socaire

Blog personal de Angel Arias. La mayor parte de los contenidos son [email protected], aunque los dibujos, poemas y relatos tienen el [email protected] del autor

  • Inicio
  • Sobre mí

Copyright © 2023

Usted está aquí: Inicio / Archivo de Trump

Quincuagésima primera Crónica desde el País de Gaigé

23 enero, 2023 By amarias 1 comentario

La cercanía a las elecciones regionales y municipales de mayo y, sobre todo, la incertidumbre respecto a su resultado, están promoviendo el adelanto de la  campaña por parte de los partidos con opciones a formar parte de los respectivos gobiernos de los más de 8.000 núcleos que dilucidarán sus preferencias para los próximos cuatro años en Gaigé, el País de los Despropósitos. La tensión pre-electoral es particularmente alta, por su relevancia, en las Comunidades Autónomas que renovarán cargos y en los grandes municipios.

Como no estamos ante un panorama bipolarizado, los líderes de los partidos que hace años representaban las mayorías de orientación conservadora o socialista, PP y PSOE, se enfrentan actualmente al problema importante de resolver, a priori, el dilema de las alianzas que formarán la coalición o determinarán los apoyos que les impulsarán hacia el gobierno. La situación está confusa, por motivos diferentes, a ambos lados del espectro ideológico, si se admite tal separación conceptual, hoy ampliamente superada.

En la izquierda, el liderazgo de Sánchez (Pedro) no es cuestionable. Tratado como mentiroso crónico por sus opositores, ha sabido poner en primera línea logros importantes de su gestión: incrementos del salario mínimo, aumento de las pensiones y del número de afiliados  la Seguridad Social y la práctica recuperación económica. El papel real de los apoyos conseguidos gracias a los fondos provenientes de la Unión Europea y del aumento del endeudamiento en relación con el PIB tiene puntos oscuros que nadie consigue dilucidar con credibilidad, dado lo opaco y contradictorio de las cifras que se manejan.

Unidas Podemos se rompe, falto de una voz única y un director carismático. Iglesias jr. (Pablo) ha perdido su perfil mediático y sus sucesoras en el atril rivalizan sin ingenio ni prudencia. Montero (Irene) desde su Ministerio de Igualdad, convertido en manantial de despropósitos, lanza leyes ideologizadas y torpemente estructuradas en lo jurídico y anatematiza a jueces, tirios y troyanos.

La sensata observación de Carmona (Manuela), advirtiendo que una ley errada debe retirarse o corregirse sin apuntar a sesgos ideológicos interpretativos de los que tienen que aplicarla, ha provocado varios exabruptos contra la ex juez, tildándola de haber traicionado a quienes la auparon a la alcaldía de Madrid. Echenique (Pablo), portavoz con claros hándicaps síquicos -un odio bolivariano contra cualquier argumento de contrario-, está anclado en el uso de un Ideario a modo de Catecismo, impropio de un país desarrollado y de una mente sensata.

Núñez Feijóo (Alberto) sube peldaño a peldaño su monte de Arafat, que a veces asemeja más ser su Gólgota o Calvario. Le ridiculizan por no hablar  inglés y referirse a Manuela como Carmela. Seguro que habla bien francés y sabe quién es Blas de Otero, si es que eso importa. Aunque su problema ante el propósito de ser el próximo Presidente del gobierno de Gaigé lo tiene con la formación con la que comparte muchos aspectos de doctrina: Vox, h cuyo líder Abascal (Santiago) carece de los mismos frenos dialécticos. Imagino que la incorporación al frente de Alvarez de Toledo (Cayetana) para reforzar la línea de retaguardia en la que ya pelean Ayuso (Isabel), Gamarra (Cuca) o González-Pons (Esteban) dará más enjundia a los mítines.

Varios miles de defensores del constitucionalismo (interpretados por el actual Gobierno de Gaigé como desleal oposición) acudieron a la plaza de Cibeles y alrededores para pedir la dimisión de Sánchez por no respetar la Norma suprema votada en el 78 y pactar con republicanos e independentistas. Hubo muchas banderas españolas y buen rollito, con un comportamiento colectivo sensato.  Alguien vio banderas con el águila imperial. La guerra de cifras respecto a los asistentes no llegó a llenar de sangre el rio, pero hay quien dice que fueron casi un millón y otros que solo treinta mil. Muchos, desde luego. Feijóo faltó, sin que su explicación apareciera como convincente. Estaban los que quiere que le voten, ¿no?

Pocos ministros del gobierno de Gaigé aguantan el desgaste, salvándose del contagio de la falta de aptitud y las torpes actitudes de las ministras comunistas-podemitas. Sobresale Ribera (Teresa), que puede apuntarse el mérito de haber conseguido frenar los precios de la energía y lanzar el proyecto del hidrogeno ducto que, ahora se sabe, llegará a Alemania. Lo anunciaron así Macron (Enmanuel) y Scholz (Olaf), en una declaración conjunta que tuvo lugar inmediatamente después que la reunión entre Sánchez y Macron en Barcelona, en la que se firmaron otros acuerdos, pero se silenció éste.

Por cierto, en Barcelona, Aragonés (Pere) se escabulló para no estar presente junto a los presidentes Sánchez y Macron cuando se interpretaban los himnos nacionales. Cada día que pasa, se le ve de menor tamaño político y, los que conocen bien lo que pasa en Cataluña, opinan que su liderazgo se tambalea a la par que la economía del pequeño no-nato país.

El fantasma de Pegassus sigue revoloteando por los cielos de Gaigé y Marruecos. Los diputados socialistas en la Cámara Europea no votaron a favor de censurar, por su falta de democracia, el régimen de Mohamed VI. Los populares se ausentaron del lugar. Gaigé, siempre  Gaigé.

Zelenski (Volodomir) exige tanques (léase carros de combate) a sus apoyos europeos y advierte que las palabras de ánimo, por sí solas, no le servirán para ganar la guerra. Es  más, si el apoyo de los Leopard europeos y sus superiores tecnologicos norteamericanos se garantizara ya, el invierno servirá para derrotar a Putin (Vladimir) antes que consiga recomponer su ejército.

Borrel (Josep), al tiempo que se felicita por la autonomía energética conseguida por la UE frente a Rusia -supongo posee información privilegiada- exhibe fortaleza.

En USA, la afición de sus Presidentes por llevarse a  casa papeles confidenciales, para leerlos con calma en el retrete y preparar sus memorias, compromete la reelección de Biden (Joe) y presagia un encuentro en los tribunales con Trump (Donald) para convencer al electorado del contrario sobre quién las cuenta más gordas.

 

Publicado en: Sin categoría Etiquetado como: Biden, Cibeles, Gaigé, Núñez Feijóo, Pedro Sánchez, Ribera, Santiago Abascal, Trump

Crónica de una desventura

25 febrero, 2022 By amarias Deja un comentario

El viernes, 25 de febrero de 2022, la situación en Ucrania es muy confusa. Existen testimonios gráficos de que un avión ruso que sobrevolaba Kiev ha sido abatido y sus restos, caídos sobre una barriada de lal ciudad, han causado el destrozo de algunos edificios. Ciudadanos ucranianos han sido contactados en sus teléfonos móviles y han dado información sobre su estado de angustia y la sensación de correr grave peligro ante el avance de los invasores. Hemos visto  imágenes de tanques por las calles de la capital y otras ciudades, filas de vehículos con ciudadanos que tratan de acercarse a la frontera, alguna fotografía de víctimas, tanto civiles como soldados.

El presidente de Ucrania, en paradero desconocido -dicen algunas fuentes que, posiblemente, desde fuera del país- insta a que se proporcione a su país ayuda internacional. Más recientemente, pide una reunión con Putin que ponga fin a la invasión, aunque no indica cuál sería su oferta para alcanzar la paz.

Por su parte, el presidente de Rusia, coherente con su papel de intoxicador, repite que la población civil ucrania no tiene nada que temer, que el objetivo que pretende su Ejército es el derrocamiento del régimen fascista y genocida de Zelensky e instaurar una democracia en el país. En consecuencia, pide que los millitares del páis invadido desistan de la lucha y no apoyen a su Presidente.

Las posiciones de la Unión Europea son extremadamente medidas y, por ello, se pueden calificar de tenues. El alto comisario Borrel se encuentra con una difícil papeleta que ha venido a demostrar el escaso nivel de su autoridad. Condenan la invasión, estudian la implantación de medidas económicas contra Rusia, los oligarcas rusos y el mismo Putin, y se reafirman en que Ucrania es un país democrático, pero, por grave que se considere la situación de infracción del orden internacional, la falta de una fuerza militar conjunta deja a los Estados miembros  ante el espejo de su debilidad como potencia mundial. Supongo que servirá el hecho para acelerar la  formación de un Ejército europeo, aunque, si la decisión no se toma en caliente, se diluirá en el vaso frío de la incompetencia, el egoísmo individual y la apatía.

Además, siempre se podrá argumentar que…como Ucrania no pertenece a la OTAN no se pueden adoptar medidas de apoyo bélico que estarían obligadas en aplicación de los art. 5 o 6 del Tratado que, por lo demás, supondrían la escalada sin límites del conflicto. Mira por dónde, la resistencia a incorporar a Ucrania a la OTAN no ha servido, paradoja cruel, para desalentar a Putin, sino que le sirve de jusrtificación para haberla invadido: considera insoportable que un nuevo Estado con frontera de Rusia pueda pertenecer a la Alianza Atlántica y, en un giro dialéctico inexplicable solo por su megalomanía, procede a invadirlo para derrocar a su gobiern0 demcráticamente elegido.

Desde Estados Unidos, las voces discrepantes del presidente Biden y del ex presidente Trump ponen una nota de incoherencia en este grave episodio. Frente a la condena clara que ha expresado el primero, que no duda en llamar nazi a Putin, indicar que la invasión es un acontecimiento de máxima gravedad que pone en peligro la paz mundial, Donald aplaude la actuación del jerarca ruso, coincidiendo con las opiniones de muchos norteamericanos con tendencia republicana, y a los que, no hay que dudarlo, Europa les cae muy lejos y. además, en el mejor de los casos, no desean participar en una nueva contienda, que supondría la repatriación a Estados Unidos de varios miles de cadáveres de soldados.

En España, la situación de consternación y desagradable sorpresa ante la invasión rusa de un Estado democrático europeo, alimentó en un primer momento respuestas discrepantes entre miembros del Gobierno. La posición de Sánchez se plasmó en un comunicado de “firme condena” y en la oferta de acogida de refugiados ucranios. Algunos de sus ministros de las facciones a su izquierda, han pasado del apoyo a Putin (con indicaciones melifluas a la falta de comprensión europea a las actuaciones del dictador, que podría sentirse marginado y, por ende, su reacción aparecer como coherente con su sensación de despecho y ninguneo), a una variedad de opiniones bastante heterodoxas, sin conclusiones ni compromisos tajantes, navegando entre las aguas de la simpatía pro-rusa y la interpretación sesgada del pasado europeo.

Hace unos minutos comenzó ante la embajada rusa en Madrid una concentración pacífica que reclama para la guerra de inmediato. Ayer tuvo lugar otra, en la que participaron algunos actores y miembros destacados de la izquierda española. Son actos simbólicos que de poca ayuda servirán a los ucranianos, abandonados a su suerte.

Aunque esto no es una crónica de guerra (me falta información, ganas y calidad como cronista), no puedo menos de registrar que los desastres humanos y materiales causados hasta ahora parecen mínimos. No consta que haya habido enfrentamientos entre rusos y ucranianos, a salvo de algunas escaramuzas sin mayor relevancia. Los habrá.

Publicado en: Actualidad, Guerra en Ucrania Etiquetado como: Borrel, Putin, Rusia, Trump, Ucrania, Zelensky

Frail democracies (Débiles democracias)

7 enero, 2021 By amarias Deja un comentario

Los gravísimos sucesos protagonizados por un grupo de miles de simpatizantes del derrotado presidente norteamericano Donald Trump, aún en funciones, tomando al asalto el edificio del Capitolio en Washington, donde los representantes de la nación deberían confirmar, de forma definitiva,  la  victoria del candidato demócrata, Joe Biden, no pueden ser considerados como un hecho aislado, anómalo, de la política norteamericana y, apurando el tiro, de la mundial.

Hay que incluir el hecho en su contexto: aquel que llevó a un individuo sin escrúpulos, con una trayectoria personal deplorable -en lo ético y en lo estético- a ocupar la presidencia del país más poderoso (aún) de la Tierra, con capacidad para decidir sobre el núcleo duro de la política internacional y posibilidad de control del más poderoso armamento mundial, además de actuar, impulsándolos o detrayéndolos, sobre sectores clave del bienestar de ese país (y de forma indirecta, sobre cientos de otros), como son la economía, los impuestos y los servicios sociales.

Es imprescindible ahora extraer de ese hecho y de la trayectoria que lo provocó, las enseñanzas, prevenciones y defensas frente a las amenazas que asedian la voluntad mayoritaria de democracia en Estados Unidos y en muchos países desarrollados y  comprometen, por tanto, la credibilidad de sus actuaciones de rechazo a las dictaduras. No se puede alardear de ejemplar si quienes están al cargo de sus instituciones no lo son.

El intento de golpe de Estado que pretendieron los seguidores del candidato derrotado, irrumpiendo con violencia y armas en la sede donde se concentra la esencia de la voluntad popular, fue visto, prácticamente en tiempo real, en cientos de millones de hogares. Ese intento de actuar contra las vías democráticas, tergiversando y adulterando los procesos reglados constitucionalmente, tiene un responsable. Resulta insólito, increíble, inimaginable, que sea el propio presidente de la Nación el instigador de tamaña irregularidad.

Parece necesario asimilar la dura verdad. La actuación claramente delictiva, intolerable, fue propiciada, desde meses antes, y de forma continuada, por el propio presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. No estuvo físicamente a la cabeza de los asaltantes del Congreso, pero sí fue su instigador. Expresó, una y mil veces, en múltiples alocuciones públicas y mensajes en las redes sociales, su argumentario terrorista: que “se le habían robado las elecciones irregularmente”, y que el “ganador era él”, en contra de las conclusiones de las comisiones electorales. Persistía Trump en esas declaraciones amenazantes, desestabilizadoras, sin doblegar su opinión, a despecho de certificaciones en los recuentos, de las decisiones judiciales y de la confirmación de la validez del resultado electoral, por el propio Tribunal Supremo. Es decir, consciente de actuar contra las previsiones constitucionales y legales.

¿Qué pretendían los asaltantes? ¿Podrían haber creído, por un solo instante, que amedrentando a los senadores con su presencia violenta, cambiarían el resultado de las elecciones y les obligarían a votar a favor de su candidato? ¿Eran votantes disgustados de Trump, o grupos de alborotadores organizados, a los que únicamente guiaba la destrucción del orden, causar daño, amedrentar a la ciudadanía pacífica, con la representación de una escena de terror, para que fueran registradas en la memoria colectiva, como un aviso?

No caigamos en esa trampa exculpatoria. Volvamos al núcleo. El sospechoso de ser culpable máximo de esa manifestación de violencia contra las instituciones democráticas es el actual presidente de los Estados Unidos, el perdedor en las elecciones, Donal Trump. Ante un hecho tan grave, su incriminación, de ser probada -aunque todos hemos sido testigos de su actuación llena de riesgos e incitaciones al comportamiento delictivo de la masa de sus votates, soliviantando a sus seguidores al calentar sus mentes con el fantasma del pucherazo electoral, mantenido a despecho de las comprobaciones y evidencias.

Me temo que, independientemente del desenlace, y de los daños (no menores: cinco fallecidos, decenas de policías heridos, del orden de un centenar de procesamientos por delitos de sedición, atentados a la autoridad, violación de espacio público reservado, desórdenes, al margen de la excepcional aplicación de la Ley marcial, de la decisión por parte del vicepresidente, desacreditando al presidente mismo, reclamando la actuación de la Guardia Nacional, etc.), el mayor daño a la democracia está hecho. El Presidente se ha convertido en el principal impulsor de las huestes que atentaban contra la democracia.

Estados Unidos ha dejado de ser ejemplo de nación en donde las libertades, el respeto a la ley y a las instituciones, formaba parte de la idiosincrasia nacional. En realidad, teníamos elementos para sospechar que era un espejismo o una verdad con importantes grietas:  violaciones de derechos en distintos puntos del país, la marginación por el color de la piel, la ausencia de protección a los débiles, el menosprecio o uso utilitario, de los gobiernos de otros Estados, progresión armamentística y debilidad de la asistencia social pública, etc. -. Estábamos cerrando los ojos para ver solo lo que nos apetecía ver de lo mucho que ofrecía un país, en muchos otros sentidos, admirable.

La situación de asalto a la democracia que estamos viviendo en España es parte del mismo mal que asola Estados Unidos y se difunde, como una peste, por todo el mundo. Dictaduras que se califican a sí mismo de democracias, elecciones trucadas, representantes de facciones que secuestran la voluntad de las mayorías. Aquí y allá vemos ejemplos sangrantes de secuestros de la democracia, abusos de poder, palabrería adormecedora por parte de quienes están en los gobiernos, para aplastar, asustar o engatusar a los que no pensaban como ellos.

Tenemos en nuestro país razón para preocuparnos, si aún no lo habíamos hecho. Cuando desde la cúpula del gobierno se alimenta la insurrección, se está atentando contra la esencia de la democracia y las consecuencias de esa vil actuación son imprevisibles. Podríamos tratar de encontrar diferencias, tranquilizar los ánimos expresando que eso no está pasando aquí y no puede pasar aquí. A mí me resulta muy difícil sumergirme en esa abstracción, y confirmo los motivos de preocupación cuando escucho algunas declaraciones de ministros del actual gobierno de España.

 

Publicado en: Actualidad, Política Etiquetado como: asalto, Biden, Capitolio, delito, democracia, españa, gobierno, Iglesias, política, Sánchez, Trump

¿Es esto realidad, o vivimos una pesadilla?

23 septiembre, 2020 By amarias 14 comentarios

Se han reunido en estos momentos de mi vida varios elementos que componen un cuadro muy singular, al menos, al nivel de realidad al que me había acostumbrado. Tenemos una pandemia sobre nuestras cabezas, con especial reincidencia sobre Madrid, que arrastra una situación económica cuyos efectos no han hecho más que empezar, y cuyo alcance no somos capaces de prever (y, lamentablemente, aún menos, el Gobierno actual y, apurando en la misma línea, la oposición).

La grave situación vírica y económica se magnifica por la tensión entre el gobierno central y el regional de la Comunidad de Madrid. La importancia referencia, a escala nacional e internacional, que supone la capitalidad de España, se ha traducido en un ataque continuado desde algunos portavoces del Gobierno (en especial, pertenecientes a la agrupación Unidas-Podemos, aliada con el PSOE y otras minúsculas facciones regionalistas) contra la actuación de la presidenta de esta Comunidad, Isabel Ayuso.

Se califica con reiteración desde miembros relevantes del Gobierno y de portavoces parlamentarios de los partidos que tienen silla en él, a la presidenta Ayuso como mala gestora, carente de liderazgo e incluso se la tacha de ser manifiestamente incapaz para ejercer el cargo que ostenta. Son expresiones de extremada dureza, injustos y, desde luego, ajenos a la cortesía institucional.

Aunque los ataques desde la coalición de PP-Ciudadanos (esto es, de derechas) que rige en la Comunidad de Madrid y en su Ayuntamiento hacia el gobierno central son menos intensos -se esgrime abandono a su suerte de la Comunidad, falta de apoyo desde las instancias más altas, etc.-, porque no se está calificando tan directamente de incapacidad al Ejecutivo o a sus miembros, el efecto hacia el exterior, es decir, hacia el ciudadano no comprometido políticamente es la plasmación perfecta de una falta de sintonía entre quienes están conduciendo el vehículo de nuestros destinos.

La escenificación del pasado lunes (21 de septiembre de 2020) cuando ambos Presidentes -central y autonómico- pretendieron ofrecer un marco de cooperación (a destiempo) en la lucha contra la pandemia, por su torpe planteamiento, escasos recursos y previsibles mermados resultados, la juzgo de pura pantomima.

Me preocupa también, y mucho, el cerco a la Jefatura del Estado, es decir, hacia la Monarquía. Miembros cualificados del gobierno se han manifestado sin ambages como anticonstitucionalistas, apoyando la república como objetivo y despreciando la figura de Felipe VI (apuntando hacia actuaciones de su padre, Juan Carlos, presuntamente anómalas y, en todo caso, realizadas cuando ya no era Jefe de Estado, en que fungió como responsable máximo del período de paz más longevo de nuestra Historia, ejemplo incuestionable de transición de una dictadura a una espléndida democracia).

El apoyo precario y espurio que encontró Sánchez a su deseo de ser Presidente de Gobierno en los independentistas catalanes y en los hijos del terrorismo vasco, mírese como se mire, es un síntoma de la extrema peligrosidad de la situación actual, desde el punto de vista de la estabilidad democrática y del equilibrio regional.

A escala internacional, aunque la preocupación por los difíciles asuntos internos invita a menospreciar la importancia de lo que pasa fuera, la situación es muy compleja. El avance de la economía china, liberada del virus -por arte de birlibirloque u oscuras razones- convierte a esa República de Repúblicas en líder mundial, con la bandera de un sistema antidemocrático, dictatorial, autárquico y de naturaleza incomprensible -en valores y métodos- para nuestra cultura occidental. Desgraciadamente, esta situación coincide en el tiempo con un Presidente norteamericano que parece sacado de un cuento de ogros y fantasmas, más dado al despropósito verbal como portavoz de un sentimiento egoísta e insolidario, que a asumir un papel relevante como conductor de las economías occidentales.

No necesitaba más para sentirme anonadado de la deriva que adoptó la realidad próxima (de mi país y compatriotas) y externa (tanto de la Unión Europea como de los bloques hegemónicos de la economía mundial, y tampoco quiero olvidar la falta de democracia que se ha instaurado en Rusia y demasiados países latinoamericanos, por no apuntar más que a lo que sobrenada).

Pues hubo más. En pocas semanas, la metástasis que se encontraba aparentemente dormida, ha decidido despertarse y golpear con fuerza. Recojo todos los ánimos de que soy capaz para no desanimarme y, como siempre expresé -a propios y extraños- para no perder la capacidad de analizar lo que pasa fuera y pasa en mi cuerpo, con toda la objetividad que pueda. Pero, caramba, no dejo de preguntarme: ¿Es esto la realidad, o una pesadilla?

Ya se la respuesta, aunque nunca vienen mal algunos comentarios sensatos que me ayuden a entender mejor lo que nos pasa. Gracias, por leerme, por estar ahí (aunque sea en la sombra), por compartir lo que pienso.

 

 

Publicado en: Actualidad Etiquetado como: antidemócratas, Ayuso, catalanismo, China, felipe VI, independentistas, Juan Carlos Rey, Monarquía, República, Sánchez, situación política, Trump, Unidas Podemos

Vergüenzas: cabras, crisis y desconciertos (y 2)

20 octubre, 2019 By amarias Deja un comentario

Quisiera creer que todo este jaleo, el maldito quilombo que nos cerca la tranquilidad como una boa, y nos atufa con su hedor, es/fuera una pesadilla. Pero no lo es, quiá. La realidad nos muestra su cara más fea, sus tentáculos de hidra, su cabeza de medusa vociferante y zafia y parece estar dispuesta a permanecer entre nosotros sin cambiar de pelaje durante un largo tiempo. Porque no sabemos cómo librarnos de ella, quitarle la piel de algas inmundas, sacarla de sus casillas para lanzarla al foso del olvido.

Han confluido múltiples factores negativos y su reunión ha conformado en nuestra vida de ciudadanos medios, anónimos y contentos con vagar del molino a la noria y de la noria al molino lo que se ha dado en llamar una tormenta perfecta. Solo que esta no nos ha traído el agua, ni se prodiga en tormentas, ni se desparrama en inundaciones y torrenteras que causan derrumbes, cosechas perdidas y hasta muertos.

Esta no estaba anunciada y, por tanto, si hubiéramos podido estarlo, no estábamos preparados para protegernos de sus efectos.

Como base de todo, sucedía que nos encontrábamos en un prolongado período electoral, una subespecie de calma chicha inconsciente, personajes a la búsqueda de autor (Oh, Pirandello), digo, de un líder y un equipo que pareciera suficiente capaz de sacarnos de la crisis económica, social y política, que se nos agarraba a los pies de la economía y la sociedad con la pegajosidad de un barro de ciénaga o se nos escurría con la viscosidad de la lamprea.

Sin otra idea para cambiar de escenario que convocar nuevas elecciones, el gobierno en funciones de Pedro Sánchez y todos los líderes políticos en funciones que hubieran tenido algo que decir, se embarcaron en la aporía de que un repetido debate con los mismos argumentos nos cansaría a muchos votantes y revolvería el cotarro de los resultados. Dudando si esta no-medida sería suficiente para mejorar escaños, el jefe de gobierno y sus asesores pensaron que sería buen momento para cambiar de sitio la momia de Franco, desviando así la atención del personal de cualesquiera otros asuntos más importantes y, desde luego, más urgentes.

Se aplicaba el viejo principio que relata a la perfección el viejo cuento judío de meter la cabra en la casa para que, al sacarla luego, los que soportaron la presión y el tufo en la habitación exigua, se sintieron aliviados y agradecidos a quien vino a liberarlos

Pero al abrir la puerta, nos dimos cuenta de que se habían incorporado al recinto real, o se encontraban ya allí sin ganas de salir, otras muchas cabras y que eran todas más fuertes, de cocear más grave, y de mayor molestia.

La dura pelea contra de la Desunión europea contra el Brexit duro está provocando atroces fisuras en el ya deteriorado edificio donde hace décadas anidaron las cigüeñas de la colaboración a tope de quienes históricamente habían ventilado sus diferencias a porrazos. El árbitro de la paz se convirtió en instigador de infamias. Porque el imperialismo que hoy representa Trump y su equipo de águilas rapaces, ha dicho basta a sostener de rositas la amalgama de intereses europeos.

Por ello, enzarzado en una guerra comercial que se sabe perderán con el poderío creciente de China y los productores de la Asia cada vez más despierta, el lobby norteamericano a recurrido a la cabra de imponer aranceles a productos europeos con el propósito confeso de proteger a su industria aeronáutica del dumping de Airbus. Cada vez más necesitados de víctimas, el amigo USA ha encontrado en el débil moflete de los productos andaluces (olivas, jamón, queso,…) la fórmula de castigo ideal, porque si se pudiera interpretar que han confundido churras con merinas, lo que han sabido es dar en la cresta al chico del pelotón, para que tomen nota los gallitos de cabeza.

¿Qué otras cabras hay? La actitud de China rechina aún más, debiendo estar muy cegato quien no ve cómo los fuertes tentáculos del gigante asiático se aprietan, implacables, sobre la economía mundial, con base en un potencial tecnológico que se ayudó a generar desde occidente creyendo que se contentarían con ser clientes y no productores de lo que se les enseñó a hacer, incluso a hacer mejor y más barato.

Ah, pero junto a tantas y tan poderosas cabras, se ha incorporado la resurrección de una cabra muy especial, que nos toca muy de cerca, porque está metida hasta las ingles en nuestra idiosincrasia de ponerlo todo en solfa aunque nos conduzca al propio desastre. Hablo, claro, del fenómeno independentista catalán, la marea que se ha convertido, al mal parecer, en incontrolable con los mimbres y cartas que tenemos, y que, aunque se nos diga para despertar algo de consuelo que solo representa a la mitad de los habitantes de esa región, se ha revelado capaz de mantener a raya al estado de Derecho y, lo que me resulta en verdad imposible de asimilar, a las propias fuerzas del orden.

Me hago algunas preguntas sobre la naturaleza de esta última cabra: ¿Por qué se está siendo tan tolerante con los revolucionarios catalanes? ¿Es que hay temor institucional a utilizar todo el poder disuasorio del (supongo, claro) moderno y eficiente instrumental de la policía y la guardia civil, capaz de someter en pocas horas a esos grupos rebeldes (de orden de dos mil personas, se nos dice), despejando su naturaleza de “incontrolados” y “anónimos”?

Parece que hay alguna intención de que la excelente preparación de nuestras fuerzas del orden aparezca como doblegada ante unos cuantos antisistema y su caterva seguidora de mozalbetes indocumentados. No se si es culpa de la indecisión o inexperiencia de Grande-Marlaska o de la voluntad de ser condescendientes con el desorden hasta que las aguas vuelvan a su cauce por sí misma. Pero si se tiene/ha tenido el temor de que una actuación firme de los garantes del orden por ley contra los insurrectos que están causando tales daños y muestran tanta agresividad como todos hemos visto contra bienes públicos y los propios agentes, provoque un crecimiento de los desmanes, en mi opinión, se está equivocado. Los pacíficos somos, en cualquier circunstancia, la inmensa mayoría. Y los que asaltan, hieren, queman, roban, matan, son la hez y la disidencia de cualquier oportunidad de diálogo.

El presidente de la Generalitat, Torra, ha reflejado de forma suficientemente diáfana de qué lado se encuentra. El instiga la cabra del desorden ciudadano, con sus soflamas de meliflua catadura. Porque nada me hará cambiar, aunque no reconozca a Catalunya, que la inmensa población de Cataluña es pacífica, es solidaria con el resto de España y es leal a la Constitución y a las leyes.

—

La foto corresponde al interior de la puerta de uno de los servicios higiénicos de un Hospital de Madrid, decorado -no se calcular en cuánto tiempo- por ociosos que parecen desear comunicar su vacío intelectual, su cortedad expositiva.

Publicado en: Actualidad, Cataluña, China, Internacional Etiquetado como: cabra, Cataluña, China, crisis, estados unidos, mundial, productos andaluces, Trump, vergüenza

Jerusalén

12 diciembre, 2017 By amarias Deja un comentario

La declaración del presidente estadounidense Donald Trump “reconociendo” Jerusalén como capital de Israel, ha avivado las ascuas de la tensión entre palestinos e israelíes. No hay por qué engañarse, sin embargo. La gravedad del conflicto entre esas dos colectividades, tan desiguales en medios (económicos y, por ende, militares) y en apoyos internacionales -aunque muy similares en población (unos diez millones, si bien con amplia dispersión geográfica- tiene fecha de inicio (1917, declaración Balfour), varias de escalada (1948, 1972, …) y carece de perspectivas de solución.

El atractivo mediático de la manifestación del mandatario norteamericano proviene de su carácter de desafortunada, por inoportuna. Jerusalén es una tierra sagrada, por donde para las tres religiones monoteístas con más creyentes del globo tienen detectado un agujero negro de conexión con lo celeste. Allí están el Huerto de los Olivos, el Muro de las lamentaciones y el lugar en donde Mahoma fue arrebatado al cielo, emulando al profeta Elías. Si el Papa católico no se hubiera afincado en Roma, los devotos del Nuevo Testamento deberían reivindicar Jerusalén como el Lugar Sagrado por excelencia.

Las creencias religiosas son importantes, pero tener esperanza de un futuro en esta Tierra son imprescindibles. Los palestinos que aún resisten en el territorio, sufriendo la realidad de su impotencia para contener con tiragomas y soflamas el avance inexorable de Israel, encuentran en la declaración de Trump un argumento que les recuerda su humillación de pueblo menospreciado, subvencionado, constreñido. Palestina ni siquiera es un país es, para casi todos los Estados con mando en plaza, solo un “observador de las Naciones Unidas”.

Este Comentario no pretende recoger la Historia de Palestina, entremezclando episodios sobrenaturales con realidades existenciales míseras. Por supuesto, el abandono de la cuestión territorial para que se resuelva entre las dos colectividades afectadas, (incapaces ahora de convivir pacíficamente -las llamadas potencias se han encargado, durante más de un siglo, con Inglaterra a la cabeza, de hacer la convivencia imposible-), dejaría como vencedor a Israel, que posee la fuerza militar y el poder económico. Si el nuevo “día de la Ira” tuviese el seguimiento que reclaman algunos imanes enardecidos, solo resultaría en varios miles de jóvenes palestinos muertos contra algunas decenas de soldados israelíes, ante la impasividad general.

Aunque, como escribió Cicerón (Orator, 46 a.C.) “¿Quid enim est aetas hominis, nisi ea memoria rerum veterim cum superiorim aetate contexitur?” (“De qué vale la existencia del hombre si no se la pone en relación con la memoria de lo que hicieron nuestros antepasados?”).

De nada. Somos prisioneros, por nuestra limitación para ahondar en lo que nos trasciende, de lo que nos vincula al pasado. Por esa razón, Jerusalén -cargada de mitos y alegorías, pero con una Historia densa y veraz-, es imprescindible para árabes, judíos y cristianos. Y en estas fechas, en que se conmemora el nacimiento de Jesús, la ascensión al cielo de Mahoma o se renueva la esperanza de que el Mesías verdadero aparezca por esa ventana metafísica, Trump hubiera debido contener sus simpatías y su devoción hacia el grupo que lo hizo presidente de los Estados Unidos de Norteamérica.

___

Un mosquitero común observa entre el ramaje de uno de los árboles que jalonan el recuperado paseo a las orillas del Tajo, en Toledo. Caía la tarde otoñal y yo, cámara en ristre, a la búsqueda de imágenes del siempre esquivo mosquitero musical, me topé con una pareja de estos acrobáticos pajarillos, revoloteando entre las hojas donde se refugian los insectos que les sirven de alimento.

Publicado en: Actualidad, Religión, Sociedad Etiquetado como: Balfour, conflicto, Jerusalén, mosquitero, Palestina, Trump

Emprendimientos

7 diciembre, 2017 By amarias Deja un comentario

El escenario de producción y consumo está cambiando, y a gran velocidad, a escala global y local. Los comportamientos de algunos de los líderes de los mayores (más poblados) ´países del mundo lo prueba con rotundidad, aunque no parece que los jefes de Estado de los países intermedios -incluida la deslavazada actuación postural de la mal llamada (desgraciadamente) Unión Europea-, se estén dando cuenta, pues no se están tomando medidas de ningún tipo, o apuntan en direcciones contradictorias. Al hablar de decisiones equivocadas debo matizar que las estoy pretendiendo valorar en términos socioeconómicos, como más tarde me propongo puntualizar.

Que Donal Trump, Vladimir Putin, o Deng Xiao Ping estén tomando decisiones que interfieren, potenciándolo, con la evolución natural del consumo y producción internos en perjuicio de la globalización de la economía no es gratuito ni improvisado. Detrás de esas actuaciones de política general existe una estrategia de base genuinamente capitalista.

Mi inclusión del presidente chino en el trío está justificada, aunque algunos comentaristas aprecian su defensa de la apertura del comercio internacional, eliminando trabas y aranceles, como genuina; no se puede desconocer que el “gigante asiático”, que ha superado ya a Estados Unidos como potencia en el mundo de la supercomputación y está a punto de hacerlo en todo el amplio campo de la IA (Inteligencia Artificial) está destinado, por voluntad de su Politik Buró y velocidad expansiva,  a ser el Gran Hermano del mundo, y ese dominio no se ejerce desde la metafísica, la religión o la filosofía, sino desde el materialismo.

Sin pretensión de levantarme a altos vuelos con este artículo (no necesito poner de manifiesto mis limitaciones), quiero dedicarlo a la capacidad emprendedora de los denominados “millennials”, entendiendo que ellos son, para muchos analistas, por edad y conocimientos, los actores, y motores, de un posible escenario de cambio. Aunque no estoy utilizando el libro más que como referencia genérica, sirve de introducción al tema el libro “Millennials, La generación emprendedora” (Fundación Telefónica, 2017), que han coordinado Alvarez Monzoncillo y Guillermo de Haro.

Las páginas finales de este trabajo (antes de extraer Conclusiones) se dedican a recoger la entrevista con Henry Jenkins,  provost (rector) y catedrático de la Universidad del Sur de California. Manifiesta en ella unas cuantas reservas con las que estoy de acuerdo, y de las que extraigo algunas: a) profunda sospecha sobre el alcance del concepto de nativo digital, b) la constatación de que estos “nativos” nacieron, y están creciendo,  en una cultura saturada de medios y orientada al consumidor, c) el equívoco de que su lenguaje tiende a borrar el proceso de aprendizaje y concentrarse en adquirir una habilidad concreta, despreciando el mundo on line. d) la tendencia del nativo digital a marginar al inmigrante digital (ya que no a los “iletrados”),despreciando las habilidades y conocimientos de éstos.

Cuando se consideran los factores de éxito de un emprendimiento en un nuevo sector (tecnológico) , la capacidad de innovación es el punto central. Sucede, sin embargo, que no pocas veces la innovación no surge del conocimiento de las diversas opciones existentes en el mercado que se trata de suplir o mejorar, sino de la convicción “a priori” (o por imitación) de que se dispone de una herramienta excepcionalmente eficaz para desarrollar una actividad o un conjunto de ellas.

Analizando someramente (advierto que no dispongo de muchos datos) la tipología del emprendedor en nuevas tecnologías, creo que responde al perfil de un universitario (no siempre egresado, es decir con título oficial), que ha desarrollado una capacidad excepcional para manejar una herramienta del grupo de las TICs (generalmente, combinación de un lenguaje de máquina completo y el apoyo de un entorno potente de comunicaciones), que, actuando solo o en conexión con otros visionarios de los que es amigo, la aplican en la resolución, ventajosa, de una tarea que ya tiene solución analógica, mejorando la misma y ampliando su campo de acción, con base en la potencia de las herramientas digitales.

La etapa de inicio de ejecución del proyecto, alimentada con escasos recursos económicos y una gran ilusión y capacidad de trabajo (hasta obsesiva) no siempre conduce al éxito. Más del 90-95% de los emprendimientos fracasan, bien por estrangulamiento financiero, incapacidad para encontrar la comercialización del producto, o, más frecuentemente, porque otras ofertas del mismo campo brindan una solución más completa y acabada. La competencia por detectar los posibles “embryo giants” por parte de las grandes empresas, particularmente, las transnacionales, y adquirirlos cuando el producto está en fase avanzada, es muy grande, y el ejemplo de otros millenials que han tenido éxito de vender su empresa por cifras muy atractivas, hace crecer la ilusión de un destino dorado para esos emprendimentos.

Al analizar las peculiaridades de la generación emprendedora, el texto de Monzoncillo y Cía , recoge, entre otras opiniones no siempre coincidentes, una advertencia: las habilidades de gestión, y las competencias para seguir desarrollando el producto, son factores que aseguran el éxito posterior…y, superada la etapa de desarrollo, el equipo emprendedor que desarrolló el producto hasta una fase que pueda aceptarse como de “madurez técnica”, debería plantearse la incorporación de un equipo especializado en el gerenciamiento empresarial, que cuente, además con habilidades comerciales.


Un cormorán  moñudo (Phalacrocorax aristotelis) se plantó, jubiloso, acompañado de su pareja (que no figura incluída en esta fotografía), ante mis narices -mejor dicho, ante el objetivo de mi cámara-, ofreciéndome sus habilidades piscícolas. Era una mañana, apenas apuntado el día, de finales de otoño de 2017, en la playa del Arenal d´en Castell de Menorca. Estuve contemplando la escena durante casi una hora, maravillándome de la voracidad del pequeño, que, de vez en cuando, me lanzaba una mirada como reclamando mi aplauso. Estos cormoranes son más pequeños que la especie carbo, y tienen el pico esbelto y amarillo. Me arriesgo a indicar que éste pertenece a la subespecie desmarestii, de pico especialmente amarillo intenso.

Publicado en: Actualidad, Economía, Empresa Etiquetado como: aranceles, crisis, economía, empleo, empresa, estrategia, globalización, Jing-Piao, Putin, sociedad, solidaridad, tecnología, Trump

Alerta roja

13 octubre, 2017 By amarias Deja un comentario

El vocabulario bursátil ha consagrado -expresión, por si misma, ambigua- el término “descontar” para expresar que el dios Capital, manejado de forma bastante misteriosa por sus fieles servidores, ha asumido los efectos de un riesgo, y ha corregido las cotizaciones, aplicando, mutans mutando, la probabilidad de que el evento perjudicial suceda realmente.

Como no soy devoto de deidad alguna (lo que solicito no se interprete como que descarto que existan, pues también asumo que, para dormir mejor, puede ser conveniente atribuir responsabilidades mágicas que cubran las desnudeces de nuestra ignorancia), trato estos días de esforzar la imaginación para entender quién podría salir beneficiado de los tres o cuatro asuntos que tienen preocupados, y, por tanto, entretenidos, al subconjunto de la población mundial que cree tener información sobre lo más grave que puede pasarle, y, claro, le apetecería tener en su mano o la de quienes controlan la cuestión desde sus intereses comunes, la manera de protegerse.

Empiezo por lo más fácil: el cambio climático. Independientemente de síntomas, estudios y criterios científicos, lo más barato a corto plazo es negarlo, y actuar, además, como si no fuera el tema con nosotros. En algunos foros -publicos o privados- si el asunto se pone feo, se saldrá del embrollo prometiendo medidas que no se pretende cumplir, o ampliando el campo de responsabilidades a quienes, si cumplieran lo pactado, comprometían gravemente su desarrollo o su supervivencia. En consecuencia, estamos en Alerta roja. Los afectados  y por huracanes, inundaciones, sequías, serán tratados como víctimas inevitables. En términos de mantenimiento, se aplican las medidas paliativas (más intensas allí donde hay votantes del cacique) y se postponen las preventivas.

En conflictos internacionales, el principio de la dejación e infravaloración de los efectos por cualquier crisis, rige igualmente. Tomemos el ejemplo del aumento de tensión en la crisis norteamericana- norcoreana. Los máximos gobernantes de ambos Estados comparten la cualidad de ser poseedores de una megalomanía imparable.

Como parte de los cretinos, su insolencia y comportamiento abusón, arruga o disuade a quienes deberían llevarles la contraria. Desde niños, Trump y Kim, habrán alimentado, estoy seguro, su carácter de matón de barrio, y la ausencia de oposición (un bofetón paterno, una enseñanza reprendedora, jefes, colegas o amigos críticos, y, entre otros entornos virtuosos, una justicia insobornable) ha hecho crecer las sinapsis entre las neuronas que desconectan el yo interno del yo colectivo. Resultado: alerta roja, preparativo para una confrontación de paranoicos que nos llevará a una hecatombe nuclear.

Desciendo a nivel local, a esta España mía, a esta España nuestra. Doy por seguro que, presionado por sus amigos de la CUP y de un imaginado compromiso con la calle (que ya son ganas de atribuir inteligencia a las masas incultas, manipulables y estentoreas a las que el Procès ha conducido como una recua de ganado), el Molt Honorable Puigdemont dejará de serlo el lunes.

Se armará la marimorena, y se resolverá de la manera adecuada -a golpes, porrazos, detenciones, gritos, ostias, tiros, guantazos, etc.- el conflicto generado en un pueblo pacifico, industrioso, pasota.

Lo mejor de todo, es que, al parecer, las Bolsas europeas, ¡y españolas!, ya han descontado los efectos. Y, según anuncia está mañana el Gobierno, se corrige solo un par de décimas el crecimiento del PIB.

Creo que la fotografía con la que ilustro hoy mi Comentario encaja como anillo al dedo. Hay rebajas, pero el precio nuevo es igual al antiguo.

Y yo, que me creo un demócrata y un socialista educado y contemporizar, soy tachado por algunos amigos y bastantes desconocidos independentistas catalanes de “facha”, “carca” e “ignorante”. Alerta roja.

 

Publicado en: Sin categoría Etiquetado como: Alerta, Cataluña, Corea, españa, guerra nuclear, independencia, Kim, medio ambiente, Puigdemont, Trump

Juguetes peligrosos

10 julio, 2017 By amarias Deja un comentario

No descarto que podamos estar sometidos nuevamente a perturbaciones cósmicas que afecten a la capacidad de raciocinio de la Humanidad. Si mi elucubración es cierta, una parte importante de los seres humanos tendrían completamente distorsionada su visión de los hechos.

La prueba de mi sospecha es imposible, pues se vería sometida a la demostración diabólica de que precisamente los afectados por la distorsión mental están equivocados, cuando ellos creen que los errados somos los demás.

Si alguno de los que han sido poseídos por el mal de la distorsión lógica fuera preguntado, opinará que lo que me dispongo a exponer es producto de mi visión sesgada de las cosas, de mi avanzada edad o incluso a -para ellos- despreciable  tendencia a criticar cuanto provenga de la izquierda o la derecha ideológicas (lo que juzgarán como una ofensa, según la parte del cerebro que les haya afectado).

Analice el lector, para que pueda comprobar por sí mismo si está libre de la anomalía, lo que piensa de estas situaciones:

a) El presidente del país aún más poderoso de la Tierra, que dispone de la capacidad para provocar una destrucción masiva de la Humanidad, se cree poseedor de la verdad absoluta.

En consecuencia con su megalomanía, improvisa peligrosamente en política exterior (menosprecia a los aliados, se presenta como inesperado cómplice de otros, eleva la tensión mundial con amenazas y bravuconadas); niega el cambio climático (confirmado por miles de científicos que llevan años analizando la evolución de la temperatura media de la Tierra); entiende que  favorecer a sus propias empresas está dentro del lema antiglobalización “América primero” (sus asesores principales son miembros de su familia y su hija ocupa el lugar del Presidente cuando a él le apetece, a despecho de la organización estatal);abomina de la libertad de prensa (pretende que se publiquen solo noticias favorables a su persona);  quiere hacer mayor el vergonzoso muro que separa a USA de México (y financiarlo con placas solares a cargo del país vecino);  incumple los compromisos y tratados firmados por su antecesor (generando una insólita inseguridad jurídica sobre el país que debía ser principal garante del cumplimiento de los acuerdos), etc.

b) Al otro lado del planeta, un personaje con parecida capacidad de movilización sumisa y esquizoide de las masas a la que tuvo el genocida Hitler sobre el pueblo alemán en la parte más oscura de su Historia, un tal Kim Jong-un, se prepara para iniciar una guerra global, construyendo un arsenal atómico descomunal. Con la población norcoreana sofronizada por  un adulterado comunismo, y con una estructura de control interno de la posible disidencia que mejora cum laude las fórmulas de la abominable Stasi, ese país situado en una de las zonas potencialmente más conflictivas del planeta, camina, a paso seguro, desde su aislamiento internacional hacia una explosión incontrolada.

No está solo en su esquizofrenia, tampoco, en esa parte del planeta. Pero analizar los distintos casos de explotación de los más humildes, vejación de etnias y tribus, conflictos enquistados, descontrol consciente, usurpación de tierras y aniquilación de los diferentes, me llevaría un tiempo del que no dispongo, ni al lector conviene.

c) En Venezuela, con voluntad reiterada de convertirse en paradigma de la negación de los derechos  a la discrepancia y a la oposición democrática, un ignorante Nicolás Maduro -contradictorio apellido para alguien con tal bisoñez intelectual-, secundado (nunca es de  otra manera) por una colección de arribistas y aprovechados ante cualquier posible reparto de poder y prebendas , no contento con haber hundido un antes próspero país en la absoluta miseria -en la estela de un visionario Chávez, adormecido por la sesgada y simplona interpretación de las glorias bolivarianas-, lanza bravuconadas a diestro y siniestro, mientras la población se muere de hambre y los recursos venezolanos (incluido el muy valioso de la capacidad de sus habitantes) se desperdician, pudren y, en su utilización descontrolada desde las corruptas élites políticas, perturban hasta llevarlo a la guerra civil, la paz social que un pueblo precisa para crecer.

d) Por supuesto, en esta relación de descalabros y descalabrados, no puede faltar la hidra de cien cabezas del terrorismo islámico -cuya apelación a una religión aún por depurar no puede ignorarse ni menospreciarse-, que alimenta la guerra civil siria, el despropósito de Irak, Irán o Libia, países en los que los intereses económicos se han enmascarado bajo supuesta defensa de derechos civiles (unos pocos ejemplos), la gerontocracia familiar de Arabia saudí, la aún endiosada corto-dinastía marroquí, la convulsa situación egipciaca (incapaz de encontrar su vía democrática), las imposibles supervivencias pacíficas en las ex-colonias africanas (en donde las economías europeas aún tienen tentáculos de los que no quieren desprenderse). Y otras decenas de ejemplos, en los que también hay que destacar la tensión, típicamente anti-humanitaria, por la que el pueblo elegido por su dios, Israel, sigue echando contra la pared, -guiado por una espada flamígera alimentada desde el capital judío norteamericano-, al pueblo palestino, subvencionado, sí, pero para que permanezca en la pobreza y no pueda levantar su cabeza como estado libre, respetable y autónomo.

e) No está nuestro país libre de este mal cuyos efectos tan sucintamente expongo. En lugar de preocuparnos por generar empleo estable, crear empresas, repartir mejor las plusvalías, unos se esfuerzan en mentir y ocultar información, otros se han ocupado y ocupan en apropiarse del dinero público (ocultando a los que nos robaron con dilaciones judiciales y protecciones especiales, injustificadas en un estado de derecho), aquellos proclaman su voluntad de secesión de la causa común (llamando mayorías a minorías muy poco cualificadas), los de más allá, sin ofrecer más perspectiva que el caos o la revolución incontrolable, persiguen y adulteran con falsedades los valiosos principios de 1) las ventajas generales de una educación exigente y de alto nivel; 2) la estabilidad de una forma de gobierno -la Monarquía-  que, amén de constitucional, carece de alternativa ni mejor ni equiparable;  3) el valor de una religión, la cristiana, que en su estado de aplicación actual, si fuera sentida, sería importante garante de la ética universal (no defendida desde muchos otros frentes, ayunos de valores que no converjan en el egoísmo personal o grupal); 4) la importancia de la solidaridad, de la defensa de la Patria, del control del gasto público, de la mejora de la asistencia social, de la incardinación de la política propia con la internacional, y, en especial, con la de la Unión Europea, que nos garantiza compartir un área de defensa económica, militar, de libertades y de ética, y una historia de superación de diferencias, con guerras (ay!) y, desde hace setenta años (1957?), con acuerdos de colaboración en la paz.

Mírese, mírese el lector, de qué lado está y, si como deseo y presumo, está con el análisis que expongo, tiéntese la ropa, porque estamos todos en vísperas de saltar por los aires. Al peligro cibernético dedicaré mi próximo comentario.


En la foto, una golondrina adulta alimenta a sus polluelos, ya formados, pero aún dependientes del sustento que le entregan sus progenitores.

En realidad, ya están capacitados para procurarse el alimento por sí mismas, aunque la comodidad de vivir a mesa puesta también se encuentra entre las aves que, en muchos casos -algunos, para el observador, inexplicables- provocan que la cría, situada junto al alimento, se hace todavía cebar por sus padres.

Si se observa la foto con detenimiento, se verá que la cría agraciada en el reparto de comida, en su boca, que su hermano aún mantiene abierta, para excitar al solícito progenitor, sostiene una hormiga alada a punto de ser engullida.

Publicado en: Actualidad, Europa, Sociedad Etiquetado como: Corea del Norte, guerra, secesión, Trump

Adela Cortina, Antonio Garrigues y la dinámica Knowsquare

3 febrero, 2017 By amarias Deja un comentario

 

El 31 de enero de 2017 tuvo lugar la entrega de los premios que concede la plataforma KnowSquare desde hace seis años. Esta invención de Juan Fernández-Aceytuno acumula ya diez años de existencia, con una trayectoria saludable y abierta. Se recuperó para el concreto acto, la Fundación Museo Lázaro Galdiano que, aunque de aforo claramente insuficiente para el número de miembros, amigos y simpatizantes -además de los responsables editoriales y galardonados- es un marco excelente para cualquier celebración, al que contagia de su encanto y trayectoria propias, que su directora, Elena Hernando, sabe potenciar con su elegancia discreta.

Se concedió el premio a la “Trayectoria divulgativa divulgativa ejemplar 2016” a la catedrática de Etica, Adela Cortina, que entusiasmó a los asistentes con una alocución, expuesta de memoria, simpática y, al tiempo, personal y profunda. “El cerebro humano -precisó- es un narrador de historias, no solo un procesador”, y la autora de La ética mínima, apoyó que “la ética es rentable para las empresas a medio y largo plazo”, para terminar recordando a Ortega: “El tigre no puede destigrarse, pero el hombre sí deshumanizarse”.

Fue seleccionado como Libro del año de Empresa (Gestión empresarial), publicado en español, “Negociar lo imposible”. de Deepak Malhotra. Malhotra es conocido por otros best sellers, entre los que destaca “Yo me he comido tu queso” (en inglés; I moved your cheese (2003), publicado en España también por Ed. Empresa Activa/Urano, 2011). Con un título elegido como respuesta a una obra ajena, “¿Quién se ha llevado mi queso?” (1998). de Spenser Johnson, el premiado ya abordaba la cuestión de salirse de los caminos trillados, potenciar la imaginación y las soluciones propias, distintas, no exploradas, en lugar de moverse por los laberintos mentales ajenos.

Se premió también a un colaborador de KS, el ingeniero industrial José Enebral, por un artículo publicado el 4 de abril de 2016, “Del liderazgo y conversación”, en la que defiende la “importancia de comunicar sin incurrir en sobreactuaciones”. Leído hasta el momento ya 2194 veces es una prueba de la amplia difusión que alcanzan las ideas expresadas en la web de esa atractiva forma de compartir ideas, soluciones, formación, ilusión y proyectos. (Enebral tiene 39 trabajos publicados, de los que varios superan las 15.000 lecturas).

El acto contó también con una participación ya consagrada como habitual, la de Antonio Garrigues que, con la fluidez con la que hace atractivos mensajes de apariencia sencilla, pero intensos, nos advirtió de que “lo de Trump no es, como muchos creen, el principio de una era, sino el final”. Una reacción a la apertura en apoyo de la globalización, al compromiso social, a la preocupación por la mejora de las condiciones de los desfavorecidos, que representan Obama, el papa Francisco y otros líderes mundiales. Hay que estar preparados para resistir, porque vienen malos tiempos.


Un invierno con períodos cálidos ha propiciado que se estén formando ya algunas parejas de aves. Estos petirrojos, casi ocultos entre el follaje, preparan su nido, entre arrullos de mutua complacencia. A ratos, aunque especialmente al amanecer y ya en la oscurecida, con obstinada actitud, el macho advierte de su propósito de defender el territorio contra propios y extraños con cantos que resultan melodiosos e intensos.

La capacidad de camuflaje del petirrojo es sorprendente. Podemos escuchar sus trinos, sonando muy cerca de nuestra posición, y no conseguir verlo hasta que, de pronto, levanta un  corto vuelo hasta el murete, poste, valladar o espesura en donde se sentirá momentáneamente confortable para proseguir con su cantata.

 

Publicado en: Sin categoría Etiquetado como: Aceytuno, Adela Cortina, Deepak Mahlotra, Editorial Activa, Enebral, ética mínima, Garrigues, KnowSquare, liderazgo, Papa Francisco, Trump

  • 1
  • 2
  • Página siguiente »

Entradas recientes

  • Cuentos para Preadolescentes (12)
  • Cuentos para preadolescentes (11)
  • Cuentos para preadolescentes (10)
  • Cuentos para Preadolescentes (9)
  • Cuentos para preadolescentes (7 y 8)
  • Por unos cuidados más justos
  • Quincuagésima Segunda (y última) Crónica desde Gaigé
  • Quincuagésima primera Crónica desde el País de Gaigé
  • Cuentos para Preadolescentes (6)
  • Cuentos para preadolescentes (5)
  • Cuentos para preadolescentes (4)
  • Cuentos para Preadolescentes (3)
  • Quincuagésima Crónica desde el País de Gaigé
  • Cuentos para preadolescentes (2)
  • Cuentos para preadolescentes

Categorías

  • Actualidad
  • Administraciones públcias
  • Administraciones públicas
  • Ambiente
  • Arte
  • Asturias
  • Aves
  • Cáncer
  • Cartas filípicas
  • Cataluña
  • China
  • Cuentos y otras creaciones literarias
  • Cultura
  • Defensa
  • Deporte
  • Derecho
  • Dibujos y pinturas
  • Diccionario desvergonzado
  • Economía
  • Educación
  • Ejército
  • Empleo
  • Empresa
  • Energía
  • España
  • Europa
  • Filosofía
  • Fisica
  • Geología
  • Guerra en Ucrania
  • Industria
  • Ingeniería
  • Internacional
  • Investigación
  • Linkweak
  • Literatura
  • Madrid
  • Medicina
  • mineria
  • Monarquía
  • Mujer
  • País de Gaigé
  • Personal
  • Poesía
  • Política
  • Religión
  • Restauración
  • Rusia
  • Sanidad
  • Seguridad
  • Sin categoría
  • Sindicatos
  • Sociedad
  • Tecnologías
  • Transporte
  • Turismo
  • Ucrania
  • Uncategorized
  • Universidad
  • Urbanismo
  • Venezuela

Archivos

  • marzo 2023 (1)
  • febrero 2023 (5)
  • enero 2023 (12)
  • diciembre 2022 (6)
  • noviembre 2022 (8)
  • octubre 2022 (8)
  • septiembre 2022 (6)
  • agosto 2022 (7)
  • julio 2022 (10)
  • junio 2022 (14)
  • mayo 2022 (10)
  • abril 2022 (15)
  • marzo 2022 (27)
  • febrero 2022 (15)
  • enero 2022 (7)
  • diciembre 2021 (13)
  • noviembre 2021 (12)
  • octubre 2021 (5)
  • septiembre 2021 (4)
  • agosto 2021 (6)
  • julio 2021 (7)
  • junio 2021 (6)
  • mayo 2021 (13)
  • abril 2021 (8)
  • marzo 2021 (11)
  • febrero 2021 (6)
  • enero 2021 (6)
  • diciembre 2020 (17)
  • noviembre 2020 (9)
  • octubre 2020 (5)
  • septiembre 2020 (5)
  • agosto 2020 (6)
  • julio 2020 (8)
  • junio 2020 (15)
  • mayo 2020 (26)
  • abril 2020 (35)
  • marzo 2020 (31)
  • febrero 2020 (9)
  • enero 2020 (3)
  • diciembre 2019 (11)
  • noviembre 2019 (8)
  • octubre 2019 (7)
  • septiembre 2019 (8)
  • agosto 2019 (4)
  • julio 2019 (9)
  • junio 2019 (6)
  • mayo 2019 (9)
  • abril 2019 (8)
  • marzo 2019 (11)
  • febrero 2019 (8)
  • enero 2019 (7)
  • diciembre 2018 (8)
  • noviembre 2018 (6)
  • octubre 2018 (5)
  • septiembre 2018 (2)
  • agosto 2018 (3)
  • julio 2018 (5)
  • junio 2018 (9)
  • mayo 2018 (4)
  • abril 2018 (2)
  • marzo 2018 (8)
  • febrero 2018 (5)
  • enero 2018 (10)
  • diciembre 2017 (14)
  • noviembre 2017 (4)
  • octubre 2017 (12)
  • septiembre 2017 (10)
  • agosto 2017 (5)
  • julio 2017 (7)
  • junio 2017 (8)
  • mayo 2017 (11)
  • abril 2017 (3)
  • marzo 2017 (12)
  • febrero 2017 (13)
  • enero 2017 (12)
  • diciembre 2016 (14)
  • noviembre 2016 (8)
  • octubre 2016 (11)
  • septiembre 2016 (3)
  • agosto 2016 (5)
  • julio 2016 (5)
  • junio 2016 (10)
  • mayo 2016 (7)
  • abril 2016 (13)
  • marzo 2016 (25)
  • febrero 2016 (13)
  • enero 2016 (12)
  • diciembre 2015 (15)
  • noviembre 2015 (5)
  • octubre 2015 (5)
  • septiembre 2015 (12)
  • agosto 2015 (1)
  • julio 2015 (6)
  • junio 2015 (9)
  • mayo 2015 (16)
  • abril 2015 (14)
  • marzo 2015 (16)
  • febrero 2015 (10)
  • enero 2015 (16)
  • diciembre 2014 (24)
  • noviembre 2014 (6)
  • octubre 2014 (14)
  • septiembre 2014 (15)
  • agosto 2014 (7)
  • julio 2014 (28)
  • junio 2014 (23)
  • mayo 2014 (27)
  • abril 2014 (28)
  • marzo 2014 (21)
  • febrero 2014 (20)
  • enero 2014 (22)
  • diciembre 2013 (20)
  • noviembre 2013 (24)
  • octubre 2013 (29)
  • septiembre 2013 (28)
  • agosto 2013 (3)
  • julio 2013 (36)
  • junio 2013 (35)
  • mayo 2013 (28)
  • abril 2013 (32)
  • marzo 2013 (30)
  • febrero 2013 (28)
  • enero 2013 (35)
  • diciembre 2012 (3)
marzo 2023
L M X J V S D
 12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728293031  
« Feb